Andas flaco ojeroso, cansado y sin ilusiones a ratos y con muchas ilusiones a otros ratos.
Mal comes, mal duermes, y cuando duermes suenas pesadillas onda: "Se me olvidaron los zapatos de carácter y falta media hora para la función y vivo a hora y media de aquíii!".
Te vuelves talachero, costurero, pintor de brocha gorda, utilero, mandadero, panadero...
¡Panadera! ¡En serio! Jajaja ésta vez me tocó.
Hasta este semestre fui a ayudar antes de los ensayos generales, y aunque no hice mucho, no deja de sorprenderme todo el trabajo que se necesita para crear la magia del teatro. Hice mandados y pinté tablas (gracias a Dios que tanto gato aduviera paseándose cerca de nosotras mientras pintábamos no me causó alergia masiva), y el día del ensayo general del otro turno jugué con series de focos y ayudé a hacer masa (mandadera-mode incluído).
En cualquier momento te descubres pensando en el show. Antier estaba escuchando una estación de radio por internet, pasaron "When You're an Addams" y de verdad que ya la pensé con coreografía Escenario 3, ¡y cantada con nuestras voces!
Te pones mil veces el vestuario para acostumbrarte a él y lo revisas para asegurate que hasta el más mínmo detallito está perfecto...
Pudiendo andar en casa con pantuflas andas en zapatos de carácter y/o los zapatos que necesitarás en la función.
Encima de todo la semana de ensayos generales coincide con la semana de exámenes finales.
Encima de todo me metí una buena enfermada de garganta... me la estoy cuidando muchísimo. Y eso que desde que entré a Escenario 3 me formé la regla de no consumir cosas frías las tres semanas antes de funciones.
Encima de todo... ¡TENGO UN PAPEL! Voy a ser el centro de atención solo durante unos segundos, pero YO YO YO! ¡TENGO MIEDO!
Es un completo contraste, en realidad.
El hecho de pensar que estaré parada en el escenario, ese mismo escenario en el que sentí la conexión y prometí que lo volvería a pisar como algo más que público, con la escenografía que les quedó increíble, con mis compañerops super talentosos compartiendo escena, usando la mega peluca que hizo Jair y que lo hace sentir tan orgulloso, con la confianza en sí d eque me hayan dado UN PAPEL, con familiares y amigos que me han apoyado viéndome desde butacas, con toda la preparación que los maestros se han esforzado en darme... Es una idea tan FASCINANTE como ESCALOFRIANTE.
Pero ya estoy en esto, es la recta final y tras tanto trabajo, ni modo de echarme para atrás. No soy una cobarde, simplemente respiraré, me concentraré y terminaré lo que empecé.
Marco nos dijo en AIDA que cada momento en el teatro es irrepetible, que si salió mal no hay manera de regresar y corregirlo, y por más increíble que haya salido nunca volverá a salir exactamente igual. Que no debíamos preocuparnos por los errores ni regodearnos en los aciertos y concentrarnos en el momento y en lo que vendrá.
Me pareció una gran lección no solo de teatro, sino de vida.
Escenario 3 para mi es un santuario de arte y de superación. Durante unas horas solo debo buscar hacer algo maravilloso, algo que no cualquiera pueda hacer y aprender todo lo posible de mis maestros y de mis compañeros. Sé que empecé muy tarde, sé que soy lenta, sé que esto puede no ser para mi, me cuesta muchísimo trabajo.
Pero al momento de estar en el escenario, me siento increíble, siento que porfin estoy haciendo lo que quiero hacer yo (a pesar de todo y de todos) y encontré en la actuación todo lo que me apasiona junto.
He conocido personas maravillosas con quienes me puedo sentir a gusto, con esa unión y complicidad que hacer un trabajo tan duro, creativo y tan necesitado de equilibrio entre todos nos da. Personas que me han ayudado a crecer en casi todos los sentidos (menos en estatura jajajaaa) y con quienes en otras palabras: he compartido el sueño.
Así que: ¡ahí te voy, Solana! Por tercera vez vamos a consumar el sueño.
A cinco días del estreno...
¡EL SHOW DE TERROR DE BROADWAY YA SE SIENTE!
¡Toda la mierda del mundo, Escenario 3! ¡Te amo!
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